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Madrid, 11 de septiembre de 2025.
Nuevas grabaciones destapadas por El País y la Cadena SER ponen contra las cuerdas a Alberto González Amador, pareja de la presidenta madrileña Isabel Díaz Ayuso. Los audios corresponden a la declaración judicial de la inspectora de Hacienda que inició el caso, Mercedes Urbano, quien asegura de forma contundente que Amador cometió fraude fiscal mediante el uso de facturas falsas por un valor de más de 350.000 euros.
Una declaración “demoledora”
Durante más de dos horas y media, Urbano describió cómo el empresario utilizó sociedades pantalla y operaciones ficticias en 2020 y 2021 para rebajar la cantidad que debía pagar a Hacienda. Según la inspectora, el acusado “sólo trató de regularizar su situación al ser pillado por la Agencia Tributaria”.
Entre las pruebas se incluyen 15 facturas consideradas falsas, algunas por importes millonarios. Una de ellas reflejaba la supuesta venta de vacunas a Costa de Marfil por 922.000 euros, cuando en realidad el contrato nunca existió. Otras procedían de pequeñas sociedades de El Arahal (Sevilla), dedicadas al transporte o la agricultura, sin capacidad para realizar los trabajos sanitarios e industriales que aparecían en los documentos.
Desmontando la defensa política
La versión de Ayuso, que habló de una “inspección salvaje” contra su pareja por motivos personales, quedó desmentida por Urbano. La funcionaria explicó que la investigación comenzó cuando Amador pasó de ingresar 300.000 euros en 2019 a más de 2,3 millones en 2020, pagando incluso menos impuestos que el año anterior. Ese salto, explicó, activó las alarmas.
Camino a juicio
Con este testimonio y la documentación aportada, la Fiscalía considera probada la existencia de dos delitos fiscales en el Impuesto de Sociedades de 2020 y 2021. El tribunal prepara ya la apertura de juicio oral contra el empresario, que afronta la acusación por defraudar más de 350.000 euros al fisco.
